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Tapping

La solución en tus dedos

Cipriano Toledo

Érase una vez un gurú muy querido por el pueblo en el que vivía. Cada tarde sus habitantes acudían a su ashram para meditar.

Un día, uno de ellos, en agradecimiento por su labor, le regaló un gatito de apenas dos meses. El gurú agradeció el regalo y se dirigió al altar con el gato para empezar la meditación. Dejó el gatito a su lado y comenzó. El gato no estaba por la labor y se puso a jugar; los habitantes del pueblo estaban más pendientes del gato que del gurú.

Al día siguiente, el gurú, que era listo, ató el gato al altar antes de empezar a meditar para impedirle que jugara.

Años después de muerto el gato y muerto el gurú, el siguiente gurú ataba un gato al altar para meditar, y siglos después había doctos tratados sobre la importancia de atar un gato al altar a la hora de meditar.

En este libro no hay gatos, solo información pragmática, comprobada y eficaz.

Prologo

Crecí viendo hacer Tapping a mi padre, pero como buen adolescente no dejaba que él me lo hiciera a mí (aunque he de confesar que, sin que me viera, yo lo hacía para algunas cosas en mi habitación).

Hoy el Tapping forma parte de mi rutina y de la caja de herramientas terapéuticas que uso en mis consultas.

Hace un par de años, entre mi padre y yo montamos el curso Mentes ricas mentes pobres, al que asistieron más de 6.000 personas. Si tenía alguna duda sobre la eficacia del Tapping, ahí se disipó. Cada día nos dedicábamos a trabajar con Tapping todos los problemas que iban surgiendo –y he de decir que surgían muchos–, pero a su vez veíamos que esas dificultades, por casualidad o por el Tapping, se iban resolviendo. Incluso cuando una semana antes del evento teníamos menos de 2.000 personas inscritas, nosotros estábamos convencidos de que el pabellón estaría lleno. Fue una dura prueba para esta técnica, ya que ni la fecha ni el lugar, 7 de julio en Badalona, eran los más propicios para un evento de esa magnitud, pero sin duda superó mis expectativas.

Me consta que este es un libro sin paja y que Cipriano ha puesto todo de su parte para que quien lo lea pueda aprender a usar el Tapping y beneficiarse de su eficacia.

Finalmente, ya que tengo la oportunidad de escribir este prólogo, quiero darle las gracias a mi padre por todo lo que ha luchado, me ha enseñado, y por todo lo que nos queda por hacer juntos.

Eduardo Toledo

Introduccion

Me caí por unas escaleras y me destrocé un hombro. A raíz de aquello acudía regularmente a un osteópata que siempre me hacía esperar. En su sala de espera solo había revistas en inglés, y mi inglés es de bachillerato español.

Uno de esos días, ojeando una revista vi un artículo que hablaba de Tapping. Era apenas media página y tenía una sola foto con los puntos de la cara. Empecé a hacer Tapping con lo que había entendido y el resultado fue increíble; ni el osteópata ni yo salíamos de nuestro asombro. Había mejorado más en veinte minutos dándome golpecitos sin entender bien lo que hacía que en más de dos meses de sesiones.

Con este libro aprenderás a usar el Tapping… y entonces la pelota estará en tu tejado. El Tapping solo tiene un problema… que funciona. Piensa bien si lo vas a leer, porque a partir de ahora no podrás quejarte, y si alguna vez lo haces, escucharás mi voz en tu cabeza diciendo: «Haz Tapping, ¡vago!».

Este libro no habla, ni enseña psicología; si eso es lo que buscas matricúlate en una facultad. Este libro solo habla de cómo solucionar problemas.

Cipriano Toledo

Historia del Tapping

Roger J. Callahan, psicólogo clínico fallecido recientemente, fue el descubridor de lo que bautizo como TFT (Thought Field Therapy), Terapia del Campo del Pensamiento, hace ahora prácticamente treinta años.

Contaba que la primera persona a la que se la aplicó fue una paciente llamada Mary con la que prácticamente había agotado sus recursos terapéuticos. Mary tenía una fobia muy intensa al agua y en una de las sesiones comentó que tenía una mala sensación en el estómago. El doctor Callahan tenía conocimientos de acupuntura y estaba interesado en terapias de tipo energético. Entonces, y antes de empezar la sesión, se le ocurrió darle unos golpecitos debajo del ojo con la intención de aliviar la molestia (debajo del ojo comienza el meridiano de acupuntura correspondiente al estómago).

Lo que sucedió después fue increíble. De repente Mary tuvo la convicción de que su miedo había desaparecido. Estuvieron haciendo pruebas, incluso se acercaron a la piscina que tenía el doctor Callahan, comprobando que la fobia que había acompañado a Mary durante años había desaparecido en un instante.

A raíz de este hecho Callahan comenzó a investigar y creó unos protocolos de secuencias específicas para diferentes problemas de tipo emocional, a los que llamó «alogaritmos». Cada «alogaritmo» era usado para un tipo de problema determinado.

Años después, un alumno suyo llamado Gary Craig hizo unos cambios que hicieron la terapia más sencilla: en vez de usar solo unos determinados puntos para un tipo determinado de problema, empezó a usar todos los puntos para todos los problemas.

El otro cambio que introdujo, también con la intención de hacerlo más sencillo, fue utilizar siempre una secuencia concreta para solucionar lo que Callahan llamó «reverso psicológico» y que impedía en algunos casos que el Tapping funcionara. Callahan lo usaba solo en algunos casos mientras que Craig lo usaba siempre.

Estos dos cambios –más supongo que un mejor marketing– hicieron que la EFT (nombre con el que Graig rebautizó la TFT), se convirtiera en una técnica mundialmente conocida.

En este libro vamos a llamarla «Tapping», que es como se la conoce de forma genérica, y haremos una mezcla de ambas técnicas en base a mi experiencia y a la de mis colaboradores y alumnos en su aplicación, adaptándola a una idiosincrasia no anglosajona.

Como funciona el Tapping

Empezaré por decir que no tengo la menor idea de cómo o por qué funciona el Tapping, y personalmente es algo que me da exactamente igual; para mí, lo realmente importante es que funcione y de eso no tengo la menor duda, y ello en base a los miles de casos documentados que existen sobre su eficacia en USA, los cientos y cientos de casos reportados durante años por las personas que aprendieron Tapping conmigo y, por supuesto, a mi experiencia personal y a la de mi equipo tratando casos de todo tipo.

También confirman mi certeza en el funcionamiento del Tapping algunos experimentos, como el realizando el 7 de julio de 2012, donde más de 6.000 personas dirigidas por mí hicieron Tapping juntas y cuyos resultados algún día me atreveré a publicar.

Sin embargo (y como espero que después de leer este libro tú también hagas Tapping), es bueno que tu mente lo entienda de alguna forma y tenga algo a lo que «agarrarse».

Para ello hemos de partir de un concepto, que aunque inconcreto y poco explicable, nos ayudará. El concepto es «desequilibrio energético».

Vaya por delante que yo nunca he visto uno, aunque a nuestra mente le valdrá. Roger Callahan llamaba a este concepto «perturbación en el campo del pensamiento». De una manera u otra servirá a nuestro propósito.

Para explicar el funcionamiento del Tapping vamos a poner como ejemplo el de una persona que tiene fobia a las arañas. Una fobia es un miedo irracional y compulsivo hacia algo, en el caso que nos ocupa a las arañas. (Aunque, si lo pensamos bien, la que debería tener miedo es la araña; si ponemos a un hombre de 70 kilos armado con un periódico o una zapatilla a combatir con un bichito cuyo peso no llega a 0,5 gramos, las posibilidades de este son muy escasas. Pero si ese hombre tiene fobia a las arañas… Creedme, será la araña quien gane el combate).

En fin, supongamos que nuestro aguerrido combatiente, harto de perder con la araña, decide solucionar el problema.

El triángulo representa a la persona que padece la fobia; la parte oscura es la parte consciente de su mente y la gris el inconsciente.

Cuando esa persona ve una araña, o la foto de una araña o piensa en una araña, ello le provoca una respuesta fóbica. Puede tener sudores, ansiedad, taquicardia, un ataque de pánico, etc.

En cualquier terapia a la que acuda se trabajará, o bien intentando desensibilizar al paciente a las arañas, o bien dándole herramientas, hierbas o pastillas para que se relaje cuando vea uno de esos bichos.

Desde el punto de vista del Tapping, cuando esa persona siente pánico al ver una araña es porque en ella se está produciendo un desequilibrio energético.

Con Tapping no trabajamos ni la causa de la fobia ni los síntomas que esta provoca.

Con Tapping solo trabajamos el desequilibrio energético.

Y, si conseguimos eliminarlo, esa persona podrá dedicarse a la cría de arañas al instante siguiente.

Desde el punto de vista del Tapping, cualquier problema que tengamos solo es un desequilibrio energético. Si lo solucionamos, también estaremos solucionando el problema. La vida se vuelve muy simple y los problemas fácilmente solucionables.

Voy a explicarte algo más. Imagina ahora que vas al médico con una mano infectada. El médico la examina y te dice: «Vaya, qué buena infección». Tú le respondes: «Sí, gracias, soy muy bueno haciendo infecciones», y después le dices: «Me gustaría que me curara el dedo índice y el pulgar». El médico te explicará que te debe curar toda la mano y no solo una parte (y si tiene un mal día llamará a los del ala de Psiquiatría).

Igualmente, cuando una persona acude a una consulta de Tapping lo hace con un problema, pero un buen terapeuta de Tapping sabe que ese problema es solo una parte de esa mano infectada y que si quiere realmente ayudar a esa persona habrá de tratar toda la «infección».

Y para terminar esta parte te contaré un cuento de explica de qué manera funciona el Tapping y cómo ha de usarse.

Era el examen final de un monasterio Zen situado en la China más profunda. El maestro entró en el círculo formado por sus discípulos y sobre un pedestal colocó un gran jarrón dorado y dentro introdujo tres flores: una de color rojo, otra blanca y una amarilla… Les lanzó una profunda mirada y pronunció las siguientes palabras: «He aquí el problema». Sus palabras todavía resonaban en los oídos de sus discípulos cuando el maestro desapareció envuelto en una misteriosa bruma.

Tres días después, sin apenas comer, sin dormir y en estado de gracia, los aspirantes a maestro seguían discutiendo sobre la naturaleza del jarrón, el significado de que fueran tres flores y lo que cada uno de los colores representaba.

En esto, en el círculo entró el hijo del jardinero, un niño curioso de siete años que, rompiendo la paz de la discusión, preguntó: «¿Qué hacéis?». Trataron de que se fuera. Le explicaron que aquello era demasiado profundo para que un niño pudiera entenderlo, pero además de curioso el niño era impertinente e insistía en que le explicaran qué hacían allí. Demostrando una gran paciencia uno de los aspirantes le contó el reto del maestro y repitió sus palabras: «He aquí el problema».

El niño paseó su mirada por todos, miró el jarrón, se dirigió hacia él y de un empujón lo tiró al suelo y lo rompió, a la vez que decía: «Ya no hay problema».

He de decir que ese niño fue el único que aprobó el examen a maestro.

El Tapping se usa de la misma forma si una persona tiene un problema; no perdemos ni un minuto en analizarlo. Nos acercamos directos al problema, hacemos Tapping y decimos:
ya no hay problema.

Ahora que ya sabemos cómo funciona el Tapping vamos a ver cómo se hace una ronda completa, de qué partes consta, cuáles son los puntos, etc.

Cuales son los puntos y donde estan

Hay 13 puntos, pero si alguien es supersticioso también podemos decir que en realidad hay solo 12 puntos + 1 para las «tonterías».

Punto 1: principio de la ceja

Punto 2: lateral del ojo

Punto 3: debajo el ojo

Punto 4: debajo de la nariz

Punto 5: barbilla

Punto 6: clavícula

Punto 7: debajo del brazo

Mas cosas sobre los puntos y los golpecitos

Hay puntos duplicados, o sea, que existe un punto a la izquierda y el mismo punto a la derecha, como ocurre con los puntos 1, 2, 3, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12 y 13.

Puede hacerse Tapping en cualquiera de los dos lados; incluso hay quien lo hace en los dos a la vez, aunque sinceramente no hace falta.

También pueden alternarse la izquierda y la derecha; por ejemplo, empezar por el punto 1 a la izquierda y seguir por el punto 2 a la derecha, y seguir alternando; en fin que puede hacerse como se quiera.

Como dar los golpecitos

Generalmente se usan las yemas de los dedos índice y medio.

Los golpecitos han de ser firmes aunque suaves; la medida nos la da la persona a la que le estamos haciendo Tapping: si nos dice que le molesta bajaremos la intensidad y si vemos que se le mueve la cabeza cuando le damos golpecitos, también.

El número de golpecitos es de entre 15 y 20 por punto, y su frecuencia… es difícil de explicar en un libro; para empezar puedes hacerlo llevando el ritmo de la canción Doce cascabeles tiene mi caballo; lo siento no se me ocurre otra...

De todas formas, cada persona acaba cogiendo su propio ritmo.

Como se hace una ronda completa

Una ronda completa de Tapping se compone de tres partes:

1ª vuelta, «tonterías» y 2º vuelta.

En Tapping damos golpecitos en determinados puntos a la vez que la persona a la que se los damos nombra el problema. Más adelante aprenderás cómo elegir las frases a utilizar; ahora solo vamos a decirte cómo hacer mecánicamente una ronda completa.

1ª vuelta. A la vez que vamos repitiendo la frase elegida, damos golpecitos en cada uno de los siguientes puntos:

Aquí termina la 1ª ronda y comienzan las «tonterías».

«Tonterías». A la vez que presionamos en el punto 13, hacemos lo siguiente: sin mover la cabeza movemos los ojos:

  1. Arriba-abajo-arriba
  2. Izquierda-derecha-izquierda
  3. Giramos los ojos alrededor de su órbita en un sentido y después en el contrario
  4. Tarareamos un solo compás de una canción; por ejemplo, Cumpleaños feliz. Contamos hasta 6 y volvemos a tararear. Cumpleaños feliz. Se tararea con la boca cerrada

2ª vuelta. Es exactamente igual que la primera. A la vez que nombramos el problema, damos golpecitos en los siguientes puntos:

Aquí termina las segunda vuelta y así habremos completado una ronda de Tapping. Por tanto:

1ª vuelta-«tonterías»-2ª vuelta = ronda completa.